Hay que paciencir con el colegir.
Eso dicen, pero yo quiero palacir para bohemir.
Los que hacen docencir, no me dejan dislexir. Pero yo no me dejo dominir y les hago contagir.
Lo mejor es columpir y jolgorir.
A mi me gusta mucho gimnasir y sandalir y acuarir.
Mi mami sabe mucho de remedir y alivir.
Mi mami dice que los que no saben silicir y magnesir, se van a anemir.
A mi mami tambien le gusta mucho rapsodir y adagir.
Mi papi no hace mas que industrir y negocir. Por eso se tiene que terapir para el angustir.
Mi papi siempre tiene que noticir y vigilir, o que se queda sin salarir.
Por eso tanto agobir y cansancir le hacen insomnir.
A mi tati le gusta baterir y delirir.
Mi tati se quiere exilir y distancir, para lascivir y malicir.
Pero mi mami dice que si hace eso mi tati, se va a demonir y naufragir, como mi tito, que no sabia abstemir y se hizo tugurir y ya esta en el cielo.
Mi tati dice que si no le dejan refugir se va a incendir, pero ni caso.
Mi primi solo piensa en caricir y delicir, y todo el rato no hace mas que tertulir y codicir con sus amigas.
Mi mami dice que mi primi se va a bulimir, pero mi primi dice que no, que eso es envidir.
Mi primi se pasa de colonir y a mi eso me hace alergir.
Mi primi cambia muy rapido de comedir a histerir.
Por eso que te obliga a obsequir y elogir, por prudencir.
Mi yayi esta siempre con su geranir y petunir.
Mi yayi antes sabia coloquir y memorir mucho, sobre el tito. Decia que el tito se quedo sin familir de tanto oficir y agencir, y por eso empezo a inercir y miserir.
Mi yayi ahora solo sabe ausencir y nostalgir.
Pero a mi me gusta silencir con ella. Asi puedo despacir y presagir, misterir y principir, espacir y materir, para alquimir y conciencir.
Por eso el colegir, para mi, es escorir.