conexión

Tus pezones se tocan con los míos,
sus polos se puentean
y es maravilloso.

No hacen falta palabras,
ya no importa la espera,
nos lo perdonamos todo.

El hielo se funde,
los fusibles se fusionan
y la funsión continúa.

La electricidad salta
de mi pecho a tus senos,
de tus senos a mi pecho.

Las cosquillas nos inundan,
llenándonos de hormigueo
y sin poder despegarnos.

Tus ojos brillan como faros,
cada vez que parpadeo
se me graba tu rostro a fuego.

Mis caricias saltan chispas de tu vello,
nuestras siluetas fulguran y relumbran,
los contornos se difuminan.

La habitación se llena de destellos,
como si una bola de discoteca
girara sobre nuestras cabezas.

Tus oídos vibran con mis latidos,
mi corazón ausculta tu pulso,
nuestra respiración se acompasa.

Mi nariz se deleita con tus pecas,
tu aroma me envuelve y embriaga,
mi lengua cata tu aura.

Nuestros labios se besan sin rozarse,
imantados por su cercanía,
extasiados de pura sensualidad.

La penumbra viene a arroparnos,
nos desdibuja y decolora,
nos abstrae y acopla.