"Sin amor no hay libertad, sino egoísmo que es el infierno."

aviso

Este blog no está recomendado para menores, así que tú mismo con tu mecanismo.

fin del aviso



12 de abril de 2008

Girado

˙euad e| a|eΛ ou ´eJJod e| e ´Чe8

˙˙˙´-| ´se| ´e| ´so|-| ´so|
´se£seue) se|-e| ´saJqw!£ so| ´sozod so| ´sop!u so| ´euedwe)-)
ap sepua!£ se| ´so!dwn|o) so| ´seu!)s!d se| ´eJdwo) e| ap so£!JJe)
so| ´so£ua!we)Jede so| ´so£JandoJae so| ´aΛa!u u!s :seue£uow
se| ´euaJe u!s :sehe|d se|´so!)eΛ ´so!J u!s ´seJpa!d u!s
:sodwe) so| ua ´sauaJ£ u!s :se!Λ se| ua ´enБe u!s :Jew |a ua
sasua!d ou ´sasua!d ou opuen) h aJdwa!s ´o|JeJБo| sowapod

˙oБ|e Ja)eЧ
apand as une ´pep!|!q!sod euanbad eun epanb ´ezueJadsa heH
˙sepua!£ se| e JeБa||
´saJaΛ!Λ J!unaJ anb heH ˙oJ£aw |e oБan| h ´se||!Je£ue)|e se|
e JeБa|| ´oЧ)a£ |a ua ´eq!JJe e!)eЧ JeΛe)xa anb heH ˙se|ed
heЧ h ´sou!)aΛ heЧ ´oJad ´so£uaw!|e heЧ ou ´enБe heЧ ou ´JaΛ V

˙eso) eJ£o Jas anb eJpua£ ´o£s!Λ
hnw eh e£sa osa ´o!)eΛ |e asJeJ!£ ap o| a|eΛ ou ´e!Jo£s!Ч e£sa
Jeu!wJa£ e seΛ owo) ¿e£sa ap J!|es e seΛ owo) ˙esua!d ´esua!d

˙a|qezue)|eu! ue£ apanb anb ew!£se7
˙˙˙eJn)o| e£sa e a|q!sod e!Jo£ede)sa e)!un e| a)aJed
anb ´oJ£aw |ap epeJ£ua e| eJ!w ´se||!Je£ue)|e se| ap sede£
se| u!s sa||e) se| ue£sa anb seso!)eJБ o| eJ!w ´o|a!) oJ£o |e eJ!W

˙[ou e!Λepo£] uo!)eJadsasap e| !£ ap auanpe as ou anb ´o)a opuoЧ
asa Jo!Ja£u! n£ ua e)zaJ) anb saſap ou ´osa uo) seБ!s ou ´eJed

˙uo!)eΛ|es u!s ´o!pawaJ u!s ´a£uawa|qe)e|dw! oJad
e£ua| ´oun e oun ´sa!Je) ap soua|| ´aЧ)a| ap sa£ua!p owo)
´opuahe) ´opue£|os ´opueſo|ƒe ueΛ as o)od e o)od anb´o£ua£sns
o!Je)aJd oJ£sanu ´so!)!ƒ!pa so| opua!punƒ ´opue£e|!p ´opue£ua|e)
´a£ua!)ed ´o£uaw!|e ns opuepJenБe ´a|q!JJa£ oБanƒ as3

˙|os |a h

˙soJeſed h saqnu ap e!)uasne eso£uedsa h eso|epue)sa
e| ua ´e£|eƒ a| anb o| ua Jesuad oqap ou ´o|JeJ!w oqap oN

˙˙˙a||nБua a£ ´aeJ£e a£ ´ewe|| a£ anb a)aJed anb´o!)eΛ ue£
´op!dw!| ue£ ´|nze asa a£ue JoΛed |e£ J!£uas oJa!nb ou ´|a e!)eЧ
uapuad so!)!ƒ!pa so| owo) JaΛ oJa!nb ou ´sew o|JaΛ oJa!nb oN

¿a|dw!s h oJnd ue£ oБ|e o£ue£ Ja|op apand owo)
˙sa!d s!w oſeq S37)OWV(] ap epedsa esJaΛu! ´uo!)eJJaqe
esonJ£suow ´¡opo£ ap oſeqap ´Je£sa e!Jaqap ou apuop ´op!puadsns
´opueБ|o) ´oſeqe !Чe ´opJnsqe o£!p|ew ´JoJJoЧ o£!p|ew ´¡JJ8

˙˙˙o|a!) |3

˙opo£ |ap e£!nb aw as ou anb e!£snБue esua£u! eun ap
opeua|| h op!Бo)aJqos eЧ aw anb ´o|a!) |a e!)eЧ opuahe) ´seſoЧ
sns ap uo!)e|dwa£uo) e| anb |enБ! |V ˙sa£ueБ|o) sa)!eJ ua)aJed
anb ´sa|oqJe so| ap uo!s!Λ e| a£ue£a!nbu! e£|nsaJ ua!qwe£

˙oΛ!saJdo sa ´eJn£|e ews!w e| e o|a!)
asa e sopeБad ueJ£uan)ua as so!)!ƒ!pa so| sopo£ sewapV ˙eJnseq
ap Jopaua£uo) o|os un !u ´euosJad e|os eun !u ´aЧ)o) o|os Un
!u ´sa||e) sesa ue£sa anb se!)eΛ o| sa euo!saJdw! aw sew anb o7
˙sepe£|eƒse sa||e) ap h seJa)e ap oua|| s!JБ oЧ)a£ un sa so!)!ƒ!pa
so| aJqos o|a!) |a ´eue£uaΛ e| Jod JeJ!w e oΛaJ£e aw u!ƒ |V

˙opuadn£sa ´seБ heЧ o)odwe£ h ´soe) un sa eu!)o) e7 ˙sauo!s!ΛoJd
se)od ´epezoJ£sap o!paw e£sa esuadsap e7 [˙zn| heЧ ou anb
J!)ap ap seqe)e ¿o£uo£ se£sa] awJe£n)oJ£)a|a oJa!nb ou !s opep!n)
uo) Jepue anb oБuaL ˙soqn£ h sa|qe) ´seБ!Λ opues!d hoΛ ´osad
!w uo) adwoJ as h e|ohe)sa ap sa o||!sed |ap [oЧ)a£] o|ans |3

[¡sopeuede sowe£sa anb !s sand] zn| heЧ o)odweL
˙Jo£dnJJa£u! |a os|nd ˙enБe heЧ ou ´epeN ˙oƒ!JБ ns Jeuo!))e
eJed a£aJnqe£ un e oqns aW ˙a|qe) ns ap ´|!)op ´eБ|an) eЧ)np e7
˙sa|qez!|!£nu! ´oЧ)a£ |e sopeſ!ƒ ue£sa oqeΛe| |a h Ja£eΛ |3
:ows!w o| ap sew ´oueq |e hoΛ ´|a£u!p |a aJqos osed ´uo!)e£!qeЧ
!w ap e£Jand e| J!Jqe Japod eJed sa|qanw sounБ|e o£Jede ´u!ƒ u3

[ope£|nsaJ ep oN] ˙˙˙awJe£Jadsap oJa!nb
´e!)eJБ aua!£ ou !se sa !S ¿e||!pesad eun sa
´opuesed e£sa anb o| Japua£ua oJБo| ou ´o|JapuaJdwo) oJБo| oN

˙eue£uaΛ e| Jod eJ£ua anb [a£uapua)se a£uaweso!Jn)] zn| e|
Jod opeueq ´|eJn£eu h o)!Бo| JeБn| ns eJanƒ asa !s owo)
´!Чe ope£sa eJa!qnЧ aJdwa!s !s owo) ´a£ua)ou! ´o|!nbueJ£
´o!)eΛ ´ezaqe) !w aJqos eJ£uan)ua as´a£uawa|qe)!|dxau!
´o|ans |a h [o|ans |a sa eJoЧe anb] oЧ)a£ |a aJqos´eq!JJe eJe)
´opeweJJedsap ´ope)|oΛ e£sa opo£ ´e)sa£oJБ sa uo!s!Λ e7

˙eapoJ aw anb
eua)sa eueJ£xa e| soſo s!w e opua!Jqn)sap´e!p |ap zn| e|
aJ£ua anb h eue!sJad e| [Jeſeq] J!qns oБ!suo)´uo!)e£!qeЧ
e| e|a£ne) uo) oJo|dxa h o|anБue) |a esed aw as o£eJ |V

˙awJaΛow e oΛaJ£e aw oN
˙o|JeqoJdwo)-o)-) e ´o|JeJap!suo)
e ´eJa!nb!s o|Jesuad e oΛaJ£e aw ou ´Jas apand ou ´ou oJad
˙oБ|e JapuaJdwo) e eza!dwa a£uaw !w ´ep|edsa !w aJJo)aJ o!
Jopns un ´o|ans |e epe||!uJo£e e£sa anb o£ou h e|JaΛow e hoΛ
sa)uo£u3 ˙oЧ)a£ |ap zn| e| e£seЧ op!e) eЧ as ´epJa!W ˙a!d |a
awopuew!£se| ´oБ|e uo) oza!doJ£ h pep!Jn)so e| ua oJodJo)u! aW

˙ew!)ua awasJae)
op!pod eЧ owo) opua!£ua ou ´ewe) !w ap e£eJ£ as anb oaΛ e|Jed|ed
|e ´a£ue!x!ƒse a|ow e£sa ap oſeqap ap J!|es h awJeJ£seJJe o£ua£uI

˙sa|qanw so| ap awo|dsap |ap Jesad e ´op!£s!saJ
eЧ eJn£)nJ£sa e| anb a)aJed ´ew|e) e| opueJadn)aJ hoΛ o)od e o)od
´Je|qwa£ ap eſap eJJa!£ e| h o!)ua|!s |a a)eЧ as a£uadaJ ap oJad

˙eq!JJe ap
sos!d so| Jod ope£se|de J!Jow e hoΛ h o£owaJJa£ un sa ´e£sa eh

˙osad ns uo) awopua!w!Jdo !w aJqos
ae) awJoua oБ|e h o|ans |a eJ£uo) a£uawe£ua|o!Λ e)oЧ) odJan) !W
˙o!)!d!)aJd ´opunƒoJd a£uawa|q!JJa£ ´opunƒoJd un ua Jae) ap
uo!)esuas e| oБua£ ´uozeJo) !w eБJeqwa oБ!£JaΛ a|q!JJoЧ uΠ

˙opueqwnJJap eJa!Λn£sa as oJa£ua opunw |a !s owo)
´opuanJ£sa opuawaJ£ un ´oso£uedsa op!nJ un e£Ja!dsap aW

Me despierta un ruido espantoso, un tremendo estruendo, como si el mundo entero se estuviera derrumbando. Un horrible vértigo embarga mi corazón, tengo la sensación de caer en un profundo, terriblemente profundo, precipicio. Mi cuerpo choca violentamente contra el suelo y algo enorme cae sobre mí oprimiéndome con su peso. Ya está, es un terremoto y voy a morir aplastado por los pisos de arriba. Pero de repente se hace el silencio y la tierra deja de temblar, poco a poco voy recuperando la calma, parece que la estructura ha resistido, a pesar del desplome de los muebles. Intento arrastrarme y salir de debajo de esta mole asfixiante, al palparla veo que se trata de mi cama, no entiendo cómo ha podido caérseme encima. Me incorporo en la oscuridad y tropiezo con algo, lastimándome el pie. Mierda, se ha caído hasta la luz del techo. Entonces voy a moverla y noto que está atornillada al suelo, un sudor frío recorre mi espalda, mi mente empieza a comprender algo. Pero no, no puede ser, no me atrevo a pensarlo siquiera, a considerarlo, a c-co-comprobarlo. No me atrevo a moverme. Al rato se me pasa el canguelo y exploro con cautela la habitación, consigo subir (bajar) la persiana y que entre la luz del día, descubriendo a mis ojos la extraña escena que me rodea. La visión es grotesca, todo está volcado, desparramado, cara arriba, sobre el techo (que ahora es el suelo) y el suelo, inexplicablemente, se encuentra sobre mi cabeza, vacío, tranquilo, inocente, como si siempre hubiera estado ahí, como si ése fuera su lugar lógico y natural, bañado por la luz (curiosamente ascendente) que entra por la ventana. No logro comprenderlo, no logro entender lo que está pasando, es una pesadilla? Si es así no tiene gracia, quiero despertarme... (No da resultado) En fin, aparto algunos muebles para poder abrir la puerta de mi habitación, paso sobre el dintel, voy al baño, más de lo mismo: El váter y el lavabo están fijados al techo, inutilizables. La ducha cuelga, dócil, de su cable. Me subo a un taburete para accionar su grifo. Nada, no hay agua. Pulso el interruptor. Tampoco hay luz (pues sí que estamos apañados!) El suelo (techo) del pasillo es de escayola y se rompe con mi peso, voy pisando vigas, cables y tubos. Tengo que andar con cuidado si no quiero electrocutarme (estás tonto? acabas de decir que no hay luz.) La despensa está medio destrozada, pocas provisiones. La cocina es un caos, y tampoco hay gas, estupendo. Al fin me atrevo a mirar por la ventana, el cielo sobre los edificios es un techo gris lleno de aceras y de calles asfaltadas. Lo que más me impresiona es lo vacías que están esas calles, ni un solo coche, ni una sola persona, ni un solo contenedor de basura. Además todos los edificios se encuentran pegados a ese cielo a la misma altura, es opresivo. También resulta inquietante la visión de los árboles, que parecen raíces colgantes. Al igual que la contemplación de sus hojas, cayendo hacia el cielo, me ha sobrecogido y llenado de una intensa angustia que no se me quita del todo. El cielo... Brr!, maldito horror, maldito absurdo, ahí abajo, colgando, suspendido, donde no debería estar, debajo de todo!, monstruosa aberración, inversa espada de Damocles bajo mis pies. Cómo puede doler tanto algo tan puro y simple? No quiero verlo más, no quiero ver cómo los edificios penden hacia él, no quiero sentir tal pavor ante ese azul, tan límpido, tan vacío, que parece que te llama, te atrae, te engulle... No debo mirarlo, no debo pensar en lo que le falta, en la escandalosa y espantosa ausencia de nubes y pájaros. Y el sol. Ese fuego terrible, aguardando su alimento, paciente, calentando, dilatando, fundiendo los edificios, nuestro precario sustento, que poco a poco se van aflojando, soltando, cayendo, como dientes de leche, llenos de caries, uno a uno, lenta pero implacablemente, sin remedio, sin salvación. Para, no sigas con eso, no dejes que crezca en tu interior ese hondo eco, que no se adueñe de ti la desesperación (todavía no). Mira al otro cielo, mira lo graciosas que están las calles sin las tapas de las alcantarillas, mira la entrada del metro, que parece la única escapatoria posible a esta locura... Lástima que quede tan inalcanzable. Piensa, piensa. Cómo vas a salir de esta? Cómo vas a terminar esta historia, no vale lo de tirarse al vacío, eso está ya muy visto, tendrá que ser otra cosa. A ver, no hay agua, no hay alimentos, pero, hay vecinos, y hay palas. Hay que excavar hacia arriba, en el techo, llegar a las alcantarillas, y luego al metro. Hay que reunir víveres, llegar a las tiendas. Hay esperanza, queda una pequeña posibilidad, aún se puede hacer algo. Podemos lograrlo, siempre y cuando no pienses, no pienses en el mar: sin agua, en las vías: sin trenes, en los campos: sin piedras, sin ríos, vacíos, las playas: sin arena, las montañas: sin nieve, los aeropuertos, los aparcamientos, los carritos de la compra, las piscinas, los columpios, las tiendas de c-campaña, los nidos, los pozos, los timbres, la-las canastas, los, l-los, la, las, l-,... Bah, a la porra, no vale la pena.