"Sin amor no hay libertad, sino egoísmo que es el infierno."

aviso

Este blog no está recomendado para menores, así que tú mismo con tu mecanismo.

fin del aviso



29 de mayo de 2009

el mesiaño II

Bueno, pues ya estamos otra vez por aquí.

Este es el enlace del libro, en las dos versiones, para imprimir y para leer.
Como de costumbre he incluido alguna cosilla inédita. Especialmente os recomiendo que le echéis un ojo al ensayo 'La tierra es fractal', que está un rato curioso, jeje.

Ya sé que lo de imprimirlo, montarlo y tal es un lío en el que muy pocos (o ninguno) se aventuran, pero igualmente me gusta ponerlo a vuestra disposición, por si algún día os tienta intentarlo.

De todas formas estoy mirando alguna editorial por si se animan a editar una selección, que eso también estaría bastante bien. Os tendré informados si hay novedades.

Nada más, gracias por vuestro interés y hasta pronto.


(En la columna derecha, bajo el epígrafe "Dersony portable" encontrarás el enlace más actual para acceder a esto.)

sheraton

Este tiene varias escenas, más o menos típicas y confusas.
Especialmente me interesa una: Es el 31 de diciembre de 1899, estoy en una ciudad que luce vitalidad y dinamismo. Su aire es limpio y moderno, elegante. Es la ciudad más avanzada y puntera del momento, el mejor lugar de la tierra ahora.
Y de toda la ciudad el punto más importante, más actual y señalado es un hotel (concretamente se trata del hotel Sheraton de Nueva York, aunque eso no quiere decir que la ciudad sea N.Y.) al que sólo acceden las personalidades más destacadas y donde empezar el año nuevo supone un privilegio muy especial.

Aquí justamente es donde estoy entrando, para reunirme con una persona muy querida. Soy acogido con un atento recibimiento, paso a su amplio vestíbulo, dejando atrás el ajetreo y el bullicio de la muchedumbre que se agolpa tras sus puertas, tratando de colarse o curiosear por dentro.
Unos amplios ventanales dejan pasar una luz perfecta, agradable, que se derrama dulcemente por la superficie del lujoso suelo amarmolado y de las robustas columnas del mismo material (cilíndricamente perfectas) que sostienen la enorme cúpula que cubre el techo de la sala.

Me llama poderosamente la atención la decoración de dicha bóveda (que por cierto desconozco si guarda relación con la real de dicho hotel o no. Además su diseño me resulta muy inspirador, me sugiere la idea para una curiosa teoría que en otra ocasión más adecuada explicaré).
Consiste en un mosaico teselado que conforma una especie de mapamundi expandido. El diseño discurre de tal manera que desciende ligeramente por las columnas y enlaza con su exacto simétrico, dispuesto en el pulimentado pavimento. Y justo en el centro de la cúpula hay dos discretas saetas marcando el tiempo. La sensación que produce el conjunto es muy especial. Este es, literalmente (más allá de todo ornamento onírico), el lugar del momento, el centro del universo, el corazón de la existencia. Aquí todo alcanza su equilibrio, su perfección.

Uno se siente abrazado, protegido, amado, bendecido, santificado, beatíficamente honrado, congraciado y agraciado con la vida (entiéndase bien esto, la sensación proviene de hallar uno su propio centro, no hay instancias externas, ni profanas ni divinas, que intervengan. De hecho la misma vida, el propio universo, conforma tu ser. Lo 'externo' es sólo una extensión de lo 'interno', y viceversa).
El resto es historia.

manta de agua

Soy una manta de agua, me poso en los planetas y descanso en ellos.
Es un placer poder dormir sobre tierra firme, ya que cuando vago por el cosmos no tengo donde apoyarme y no logro dormirme (sufro de insomnio crónico).
Flotar en medio de la nada no resulta divertido en absoluto. En cuanto cierro los ojos me entra vértigo, una angustia como quien va a la deriva o cae en un pozo infinito. Es lo que tiene el vacío, que juega malas pasadas y cuesta lo suyo acostumbrarse a ese miedo instintivo.

Pero sobre tierra firme es otra historia, la cosa es mucho más sencilla y placentera, basta con recostarse delicadamente y sumirse en un plácido trance sedante, somnoliento, relajante. Mecerse tranquilamente, dejarse ir, disolverse, fluir, flotar.
Es una curiosa paradoja que precisamente uno no pueda hacer eso cuando nada lo constriñe y sí cuando algo lo retiene.
Total que, mientras duermo, mi cuerpo se balancea y respira suave, lenta, rítmicamente. Y dicen que mis orillas encandilan, seducen, hipnotizan a quien las mira. Aunque a veces me agita o inquieta algún leve tormento interior.

A cambio de este lecho apacible (acogedor, estable, seguro) yo dejo que mis bordes se deshilachen un poco y den origen a la vida. Cosa que siempre alegra y divierte un montón a los planetas. Lo malo es que la vida trae consigo otras consecuencias, algunos inconvenientes y molestias. Conforme crece y evoluciona se vuelve un problema, afecta a mi pacífico reposo, a mi merecido descanso.

A nadie le gusta verse pisoteado, manchado, troceado, triturado, aprisionado, estrujado, explotado, etc. Pero para mí lo peor de todo es que me fundan los polos. Ese es mi final, pues esas masas de hielo son las que me sujetan a la tierra y sin ellas simplemente resbalo y caigo de nuevo al espacio sideral, donde flotaré perdida infinitos eones hasta que pueda volver a posarme (si así lo quiere el azar) sobre otro planeta.

Y fastidia bastante que a una la despierten así de su sueño. Además, que la vida es bien tonta, pues en cuanto me despachan de ese modo, de esa manera, no les queda más remedio que desaparecer, pues no pueden vivir sin mí. Y se permiten el lujo de expulsarme...
Qué te parece eso? No hay quien los entienda, la verdad.

robot

Este es harto remoto y vago. Además tengo la vaga intuición de que, en parte, proviene del recuerdo de una peli vista en la infancia. O sea que hay una especie de mezcolanza, pero aun así hay algo relevante y pertinente en él (vamos, que aunque no puedo precisar si realmente sucedió o sólo es una fantasía, un capricho de mi memoria, tampoco puedo asegurar lo contrario. En fin, que el sueño insiste en haber sucedido, a pesar de todo).

La cosa es así: Es verano, al mediodía. La calle está vacía, voy por ella corriendo, huyendo de alguien que se supone me persigue. Miro hacia atrás de vez en cuando pero no veo a nadie, sin embargo siento que está muy próximo. En un descuido tropiezo con la acera y me golpeo la rodilla contra el suelo, abriéndome una brecha considerable en la piel. Duele mucho, soplo sobre ella para aliviarme, limpio la herida de tierra y piedrecillas con la mano. Sale algo de sangre pero no mucha. Lo raro es lo que veo ahí dentro: veo hierro, cables, circuitos electrónicos (nada de carne, músculo o hueso) y eso me perturba profundamente, me invade una súbita sensación de incredulidad, de miedo y desconcierto, de vértigo.

Soy un robot, terrible descubrimiento. Entonces, no estoy vivo? No tengo alma? Por qué? Cómo? Quién? Esto es tan inesperado, tan sin sentido que estoy completamente descolocado, ya nada más tiene importancia. Desaparece todo a mi alrededor y solo queda la duda, una extraña angustia informe, incomprensible. Y con esa profunda duda (primaria, no articulable) me despierto y me acompaña aún un buen rato. Y si en realidad...? Quién sabe.

cortar y pegar

Mi papá es medico y se pasa el día cortando a la jente para arrelargla por dentro. A beces nos cuenta cosas pero da mucho asco.
Yo soi dos, vueno no, sí, pero... Es que mi ermano es igual! O sea, que no es mi ermano. Bueno sí, lo que pasa es que nazió a la vez que lló, es un copiota. Jolín, qué difizil es esplicarlo. Todo por su culpa!
Yo soy yo y él es sólo mi jemelo, nada más.

Lo que pasa que un día mi papá dijo que uno de los dos hera era el ijo de berdaz y el otro el de repuesto. Luego dijo quera una vroma, pero desde entonzes no paramos de conpararnos porque ninguno los dos quiere ser el de recanvio.
Total que sienpre estamos discutiendo y peleando por ber quien es el mejor, y yo me chibo de todo lo que aze mi ermano y él tanvien porque es un enbidioso y un copiota. Pero luego enzima mi mamá nos castiga a los dos, no es justo!

Y una vez mi ermano se calló por las excaleras y se le ronpio el vrazo y yo mes capé de casa para que no me quitaran el mío y se lo ponieran a él. Pero enseguida me piyaron, auque por lo menos me libré deso porque ya lo avían escaloyado... fiu!
Pero entonzes a mi ermano le dió ravia estar ronpido y yo no y cojió y me enpujó por las escalerax y men tubieron que escanlollar a mí tanvién. Y es un royo porque pica un montón.

Luego, un día él se dió un tronpazo y lló me reí por ques un patoso y por eso, porque cada bez pareze más que és el de repuesto.
Pero además es un tranposo, porque sienpre intenta que quedemos iguales. Lo que izo es que se quitó las costras de las eridas y me las pegó a mí mientras estava durmido. Y luego no me se ivan! Porque las avía pegao con superglú y me tubieron que arrancar un trozo de piel y todo.

Asi que otra bez estavamos enpates, pero yo ya me arté y cojí el visturí de mi papá, que sienpre lo guarda en su cuarto, y le pegué un buen corte a mi ermano, pa que aprenda y me deje ya enpaz. Pero pegó un grito tan grande que me asusté, y entonzes él cojió otro visturí y me pegó un corte a mí tanbién. No beas cómo duele..., todabía me acuerdo. Luego ya nos picamos y se nos fue un poco la mano porque la cosa se puso muy fea enseguida.

Y aí estavamos los dos, sangrando un montón, llenos de rotos por todos lados y con pedazos sueltos por el suelo manchando la abitazión. Entonzes yegó mi mamá y se puso como loca, que qué avíamos echo y chús del zielo, que me baís a matar de un disgusto y qué boi yazer con bosotros, ay del amor ermoso, qué escavechina, madre mía... y cosas así.

Y luego bino una anvulanzia y nos pusieron un montón de tuvos y cosas y luego se nos yebaron al ospital, lo que pasa es que aí ya no me acuerdo mui vien lo que pasó, sólo que luego yo notava como si me faltase un trozo o alguna cosa, no sé, algo. Y tanpoco me podía mober casi, me pesaba todo el cuerpo y mi ermano igual.

Total que yo creo que ya no nos bamos a pelear más, porque está claro que ninguno de los dos es el de recanvio, porque si no no nos avrían dejado así a medio montar a los dos. Y yo se lo digo a mi mamá, que en cuanto nos pongamos vien bamos a ser vuenos y nos bamos a portar mu vien, pero entonzes mi mamá se a puesto a yorar un poco y no se por qué.